Comedia religiosa para reír como dios manda desde lo más sagrado del corazón de sus creadores.
Cuidado con hacer zapping en ciertas épocas del año porque os podréis encontrar un Ben Hur como un castillo con sus 212 horas de duración. Te pones con ella de sobremesa, entras en un bucle sofá-tú-tú-sofá y llegas hasta la cena con los ojos bien brillantes, y no sabes ya si estás protagonizando Interstellar o Marcelino pan y vino.
Puede que estés cansado de las películas de siempre. Puede que tengas ganas de reír como dios manda. ¿Sabías que en la Biblia también se ríen de la vida? Génesis 17:17 Entonces Abraham se postró sobre su rostro, y se rió, y dijo en su corazón: ¿A un hombre de cien años le ha de nacer un hijo? ¿Y Sara, ya de noventa años, ha de concebir? Pues Abraham, deberías ver esta lista de películas para seguir riéndote. Comedia religiosa para quedarte como Dios.
1. Así en el cielo como en la tierra de José Luis Cuerda (1995)
Esta fábula teológica tiene el sello inconfundible del director manchego José Luis Cuerda. Él sí que sabe reír como dios manda. Un ruralismo mágico en el que el cielo es justo lo que queda encima de España. Fernando Fernán Gómez es Dios. Jesús Bonilla es Cristo. Paco Rabal es San Pedro y Quique San Francisco es el Arcángel Gabriel. A este ángel anunciador le cuesta encontrar mujeres vírgenes y las que encuentra no quieren ser anunciadas.
De todo esto se ríe José Luis Cuerda y para entender mejor esta película, cabe decir que Cuerda iba para cura. Estudió tres años en el seminario y se nota en la película que tiene unos buenos conocimientos religiosos. Se nota en su guión y quizás también se nota que tuvo una crisis de fe y abandonó el seminario. Incluso él cuenta que dejó de acompañar a su madre a misa. En la película un personaje muy importante también tiene una crisis de fe.
2. La vida de Brian de Terry Jones (1979)
Poder ver en una película cantar a hombres crucificados: “mira siempre el lado positivo de la vida” es absolutamente genial. Aquí los Monty Python se coronaron. Fue su tercer largometraje y un éxito en taquilla. Se cuela en la lista de las mejores películas de comedia de la historia. Esto no evitó que fuese considerada de blasfema. Un hippie de Nazaret llamado Brian y todos sus seguidores. Sobre esto dijo su director que iba la película. Sobre aquellos que durante los siguientes dos mil años se dedicaron a torturar y matar porque no acababan de ponerse de acuerdo respecto a lo que Jesús proclamaba sobre la paz y el amor. Y es que en esta comedia no se ríen de la religión. Se ríen de las actitudes religiosas.
3. Increíble pero falso de Ricky Gervais y Matthew Robinson (2009)
En esta película descubres cómo se puede reír y preguntarse a la vez por la religión, la moral y la vida. La sinceridad tiene mala uva. Es divertido ver las crueldades sinceras que todos podemos pensar y en esta película se dicen. No se puede mentir. No se han inventado las mentiras pero su protagonista. Ricky Gervais, el creador de la gran The Office, ha adquirido el placer de mentir. Y miente rodeado de grandes actores que hacen apariciones estelares. Están Philip Seymour Hoffman, Edward Norton o Tina Fey. Al final todos participan en la burla que se hace de la Iglesia a la que se muestra como la gran mentira.
4. Jesucristo Superstar de Norman Jewison (1973)
Con esta película sí que vas a reír como dios manda. Es de género musical pero la consideramos también comedia porque es un descojone ver a los personajes bíblicos cantando y todo esto verlo mezclado con pantalones de campana y peinados afro. La religión es música. En las misas se escuchan unos ‘temazos’ que ya quisieran muchos musicales de Broadway. Esta película es una adaptación de uno de esos musicales. Los últimos días de Cristo cantados con Rock. Jesucristo se hace humano y parece más un Che Guevara, un Malcolm X o un Martin Luther King. Se rodea de coreografías que muestran los conflictos de los personajes. La ambientación no es rigurosa. Hay un autobús y un mensaje de liberación del pueblo y en concreto de los afroamericanos.
5. Como Dios de Tom Shadyac (2003)
Todo lo que toca Jim Carrey nos encanta y si Dios es Morgan Freeman, más. Esta película habla del libre albedrío. De lo aburrido que sería todo si todas nuestras plegarias se cumpliesen. Se ríe de la religión. Dios hace huelga y Carrey entra en acción. Una película dónde sus gestos parecen menos protagonistas que el guión o que lo colorido de su fotografía. Una cinta que desprende buen rollo y en la que también se disfruta de Jennifer Aniston.
Esta película tiene una segunda parte que se hizo en 2007, Sigo como Dios, protagonizada esta vez por nuestro amado Steve Carrel, con la que puedes seguir la saga y reír como dios manda.
6. Dogma de Kevin Smith (1999)
La batalla entre el bien y el mal no podría darse en otro lugar que no fuese Nueva Jersey y si juntas en esa guerra a Matt Damon y Ben Affleck sale como resultado una comedia negra bastante digerible. Una reflexión con sarcasmo que critica el sexismo, la homofobia, el racismo o el capitalismo. La Iglesia se somete a juicio en una película en la que Salma Hayek se ganó una nominación a los Razzie como peor actriz secundaria. Dios la libre. Una cinta con mucho ingenio de Kevin Smith, un director que se marcó una obra de arte con Clerks y que con esta fábula religiosa, no defrauda.
7. Halal love (and sex) de Assad Fouladkar (2015)
Del Islam también se puede reír uno. Los protagonistas de esta comedia coral son hombres y mujeres musulmanes que tratan de llevar su vida amorosa y sus deseos sin romper ninguna regla religiosa. Algo difícil cuando se quiere la completa libertad y sin embargo están arraigados los tabús sexuales. En la película se ve cómo se vive el amor y la religión en Beirut. Tres historias tragicómicas interconectadas que reflexionan sobre la guerra de sexos y las crisis de pareja. Una cinta que demuestra que no todo sirve y no todo es machista en la sociedad islámica. Una muestra de que los creadores también están avanzando preguntándose sobre el machismo de su sociedad, riéndose de ello y dando estos pasos en el Cine, avanzan hacia la modernidad.
8. Morirse está en hebreo de Alejandro Springall (2007)
También podemos reír como dios manda del judaísmo, reírnos de quién quiere parecer una buena familia judía. En todas las familias cuecen habas. Morirse está en hebreo es una comedia que tiene como escenario el proceso de duelo de una familia judía-mexicana. Tras la muerte súbita del abuelo Moishe, dan inicio los rituales de un encierro obligado y, con ellos, una catarsis que lleva a la familia y amigos a descubrir los lazos que los unen, los secretos que se han guardado y la relación que tienen con el entorno que los rodea. Con una peculiar mirada, su director hace que conozcamos algo más a los judíos y hace que dudemos de muchos de nuestros valores, de nuestra ética y de algunas creencias que han perdurado durante siglos y que puede que no estén muy bien.
9. Matar a Dios de Caye Casas y Albert Pintó (2017)
Una familia se prepara para celebrar el fin de año en una casa aislada en medio del bosque cuando irrumpe un misterioso vagabundo. Es enano, dice ser Dios y amenaza con exterminar a la especie humana al amanecer. Así empieza la sinopsis de esta película con toques de teatralidad y esperpento. Con un fondo religioso, sirve para reflexionar sobre la familia, el egoísmo, las relaciones y el rencor. Un buen reparto que da dosis de excentricidades y un buen guión con algo de gore. Después de El día de la bestia, que bien podría estar también en esta lista, es bueno ver algo distinto en el cine y que además vuelva a tener sello español.
10. Habemus papam de Nanni Moretti (2011)
El absurdo se hace película y Habemus papam se mete en la Santa Sede con ironía y con un gracioso punto de vista de El Vaticano antes, durante y después del cónclave que elegirá al nuevo Papa. Un Papa afligido, asustado y deprimido con una peculiar personalidad. Sería divertido que el hombre más poderoso de la Iglesia también dejase mostrar sus penurias. Un hombre humilde dentro de tanta grandiosidad vaticana. Su director, Nanni Moretti muestra que después de toda esa opulencia, existe lo cotidiano.
Habemus papam recuerda a The Young Pope, la serie de Paolo Sorrentino. No podemos acabar este artículo sin nombrarla. Qué ‘serión’ protagonizado por Jude Law. Son muchas las series y películas que han querido reírse también con la religión porque todo puede tener su punto ridículo y porque la risa existe desde antes de Cristo. Así que, que el humor esté con vosotros y con vuestro espíritu. Amén. Y ahora, ¡a reír como dios manda!
Si has llegado hasta aquí es que te encanta la comedia. No te puedes perder esta artículo: La historia de la comedia en el cine clásico.
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